martes, 9 de junio de 2015

1. La web social

1. La web social


¿Internet ha muerto? Esto es lo que afirman algunos gurúes o profetas del ciberespacio,
mientras que otros indican que se ha socializado. Según ellos se ha humanizado utilizan-
do la inteligencia ambiental tanto en nuestros mundos virtuales en la Red (que se han ido
fusionando con nuestras vidas físicas) como con la utilización de dispositivos móviles.

Los denominados nativos digitales como tú (nacidos a partir de las últimas décadas del
siglo XX) ya no podéis vivir sin estar conectados entre vosotros, con las cosas o estas
entre ellas. Los blogs, tuits o muros de vuestros amigos requieren de vuestra atención en
tiempo real (la información se quiere consumir en el mismo momento en que se genera
desde cualquier sitio de manera ubicua, a veces, incluso geolocalizados).

Esto mismo quieren las empresas actuales: aprender, conocer, analizar y conversar con
sus clientes prosumidores para venderles sus productos, según sus necesidades propues-
tas por ellos mismos o por influencers que generan ingentes cantidades de información
de varios petabytes que van a obligar a generar metadatos sobre los mismos que permi-
tan darles una relación semántica que ayude para catalogarlos mejor y tratarlos como
grandes almacenes de datos (en inglés data warehouse) o nuevos sistemas llamados
big data que permitan que se extraiga conocimiento de ellos o incluso de la Internet
profunda o invisible.

Siendo la Web, sin duda, el servicio por excelencia, aunque cada vez más con la Internet móvil se tienda a la utilización de aplicaciones web específicas llamadas apps para hacer cosas más con-
cretas dentro de las plataformas web. Las múltiples herramientas que toda organización,
empresa o usuario dispone para publicar cualquier tipo de contenido, ya sea de forma
individual o colectiva (blogs, wikis, etc.), contribuyen a la construcción de un espacio de
comunicación cada vez más abierto y democratizado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario